Hoy se celebra el Día Internacional de las Mujeres. El 8 de marzo se ha convertido en el día en el que se visibiliza la lucha feminista y se persigue crear conciencia social sobre los derechos de las mujeres y sobre la consecución de la igualdad real entre ambos géneros.
Concentraciones, huelga y manifestación; el abanico para participar activamente en este día y en el movimiento que reivindica la igualdad entre hombres y mujeres, es amplio. Sin embargo, no siempre se está dispuesto a apoyar la causa.
Cuando no se cree en las capacidades de las mujeres, no se les quiere empoderar y no se defienden sus derechos se está de frente y se rehúsa acudir a estas citas haciéndose invisible el 8M. Es el caso del Partido Popular. Sus líderes buscan eufemismos y excusas para no participar en los actos convocados desde las plataformas feministas y desde las principales centrales sindicales. PP estará ausente.
Ciudadanos, como suele hacer, duda y acaba haciendo lo contrario a lo que dice. Titubean sobre feminismo e inventan nuevos vocablos que sólo persiguen confundir a la opinión pública. Su defensa a ultranza de la legalización de la prostitución y de los vientres de alquiler –mal denominada maternidad subrogada- choca frontalmente con los paradigmas que defiende el feminismo, porque no se trata, en ninguno de los casos, de defender la libertad y los derechos de las mujeres.
PSOE y Podemos han sido las únicas formaciones políticas que se sumarán a todo tipo de actos organizados con motivo del 8M y han animado, además, a la población a participar en ellos porque, como dicen, es el tiempo de la libertad, de las mujeres.
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