El consejero andaluz de Salud recibe un aluvión de críticas en el Parlamento por su gestión de la sanidad pública, los fraudes en la compra de material sanitario y por preferir hablar de violencia “intrafamiliar”
El consejero de Salud de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, va a tardar en olvidar esta semana, en la que ha recibido críticas por todos los flancos. El Pleno del Parlamento de Andalucía ha sido el escenario del particular chaparrón que le ha caído a Jesús Aguirre, quien ha centrado las preguntas de máxima actualidad de los grupos de la oposición.
Los cuestionamientos al consejero se iniciaron en la tarde de este miércoles, cuando Aguirre tuvo que dar explicaciones, una vez más, por la situación que presentan actualmente la Atención Primaria y Hospitalaria en Andalucía, con demoras inéditas y que, a estas alturas, ya no pueden justificarse por la pandemia de covid-19.
Ya en la jornada del jueves, el consejero se ha vuelto a erigir en protagonista de la sesión plenaria, al recibir tres preguntas de máxima actualidad: una de ellas, formulada por el PSOE, sobre el presunto fraude en la compra de material sanitario durante la pandemia y las otras dos, planteadas por el PSOE y Unidas Podemos, sobre las recientes declaraciones del consejero acerca de la violencia intrafamiliar.
En el caso del presunto fraude en el SAS aprovechando la compra de material sanitario por la pandemia, que la justicia investiga actualmente, el consejero de Salud ha confesado que no habría sido un único intento, sino hasta cuatro.
En cuanto a las declaraciones en las que afirmó “preferir” el uso del término “violencia intrafamiliar” sobre el de “violencia machista”, las escasas explicaciones del consejero no han bastado para aplacar a la portavoz socialista, Ángeles Férriz, quien ha recordado el largo historial del Gobierno de Moreno Bonilla para obstaculizar la lucha contra la violencia sobre las mujeres y ha advertido de que “sólo los machistas niegan la violencia de género”.
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