La agricultura almeriense se vería en una tesitura más que complicada si los números le dan a Moreno Bonilla para gobernar con la ultraderecha
La noche de las elecciones presidenciales en Francia, la diputada de Vox por Granada y probable candidata a la presidencia de la Junta de Andalucía, Macarena Olona, se dejaba fotografiar junto a la líder de la ultraderecha francesa, Marine Le Pen. La instantánea era difundida a través de Twitter por el mismísimo vicepresidente primero de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé.
Vox, el socio preferente de Moreno Bonilla para seguir al frente de la Junta, mantiene una relación más que estrecha con la Agrupación Nacional de Marine Le Pen. Esta fuerza política de extrema derecha defiende “la soberanía nacional” y, para ello, propugna “el control” de las mercancías que entran en Francia desde otros países europeos. Esto significa reducir las ventas del campo español en Francia, lo que perjudicaría enormemente los intereses de la agricultura almeriense. Cabe recordar que Francia es actualmente el tercer destino de las hortalizas de la provincia, por detrás de Alemania y el Reino Unido. En 2021, el mercado francés importó frutas y hortalizas almerienses por valor de 523,3 millones de euros.
Con todo, el apoyo de Vox a Marine Le Pen -a costa de los intereses del campo almeriense- no es lo más preocupante. El verdadero problema es la postura antieuropeísta de Vox, que tendría gravísimas consecuencias para la agricultura de la provincia de conseguir la ultraderecha competencias en esta materia, algo que no es descartable, dado que Moreno Bonilla cuenta con poder apoyarse en Vox para formar gobierno.
Según han indicado los líderes de Vox en numerosas ocasiones, la formación ultra apuesta por “revisar los acuerdo de libre comercio” existentes en la actualidad, lo que camina en dirección contraria a la Unión Europea y la Política Agraria Comunitaria (PAC), que tiene a España entre sus principales beneficiarios.
Frente al mercado común europeo, Vox propugna la defensa del producto nacional. Para visibilizar el supuesto apoyo a agricultores y ganaderos, meses atrás la formación de ultraderecha se dejó ver en las manifestaciones del sector primario. Sin embargo, al mismo tiempo Vox estaba votando en contra de la Ley de la Cadena Alimentaria impulsada por el Ministerio de Agricultura. Esta ley ha conseguido prohibir en toda España las ventas a pérdidas, defendiendo por la vía de los hechos la renta de los agricultores al impedir que la gran distribución les imponga precios por debajo del coste.
Así las cosas, cabe concluir que la agricultura almeriense se vería en una tesitura más que complicada si los números le dan a Moreno Bonilla para gobernar con la ultraderecha. De hecho, la cartera de Agricultura es una de las que Vox mira con más interés, como se ha podido comprobar en Castilla y León.
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